Por qué las 44 toneladas no son una buena noticia para todos

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Por qué las 44 toneladas no son una buena noticia para todos
La entrada en vigor del nuevo límite de 44 toneladas para determinados vehículos pesados en España ha sido presentada como un avance en eficiencia logística. Sin embargo, para una parte fundamental de la cadena de suministro, los transportistas, esta medida está lejos de ser una buena noticia. A continuación, analizamos por qué.

1. 📉 Más carga, pero menos tarifa

Aunque transportar más peso por viaje puede parecer una ventaja, muchos cargadores están reduciendo las tarifas por tonelada, argumentando que el nuevo límite permite ahorrar en número de trayectos. El resultado: el transportista cobra menos por hacer más trabajo, asumiendo además mayores riesgos y costes operativos.

2. 🔧 Costes de adaptación no compensados

No todos los camiones pueden circular con 44 toneladas. Para hacerlo, deben cumplir requisitos técnicos específicos:

  • Ejes adicionales

  • Suspensión neumática

  • Frenos reforzados

  • Neumáticos de mayor capacidad

Estas adaptaciones suponen una inversión significativa que, en la mayoría de los casos, no está siendo compensada por los cargadores.

3. ⚠️ Aumento del desgaste y del consumo

Más peso implica:

  • Mayor consumo de combustible

  • Mayor desgaste de neumáticos, frenos y componentes mecánicos

  • Más exigencia para el conductor en términos de seguridad y maniobrabilidad

Todo esto incrementa los costes de mantenimiento y reduce la vida útil de los vehículos.

4. 🧾 Falta de revisión del Observatorio de Costes

El Observatorio de Costes del Transporte, herramienta oficial para calcular los precios de referencia, aún no ha actualizado sus modelos para reflejar el impacto real de las 44 toneladas. Esto deja a los transportistas sin respaldo técnico para justificar subidas de tarifa.

5. 🧭 Desequilibrio en la negociación

En muchos sectores —como el forestal, el agrícola o el industrial— los cargadores imponen condiciones unilaterales. El transportista, especialmente si es autónomo o pequeña empresa, carece de poder de negociación y se ve obligado a aceptar tarifas a la baja o perder el contrato.

 

🛑 Conclusión

La medida de las 44 toneladas puede beneficiar a grandes operadores logísticos y cargadores, pero no es neutra ni equitativa. Si no se acompaña de una revisión tarifaria justa, apoyo técnico y actualización normativa, el coste de esta “eficiencia” recaerá, una vez más, sobre los hombros del transportista.